Se acercaba la primavera y una mañana después del desayuno, Derek estaba
hablando con James y con Yuri antes de ir a ver a Iliar con quien tenía
entrenamiento ese día, cuando un Havarik se acercó a ellos.
-
Biagyzlim sarìeris -- se
disculpó y miró a Derek -- Dim
lavny duahirivi sienvirja [1]
Derek se disculpó con sus acompañantes y marchó al despacho de Istvan,
todos sabían que cuando alguien en el Laki decía Dim lavny solo podían estar refiriéndose a Istvan. Cuando llegó a
las puertas del despacho, los dos Havariks de guardia a quienes ya conocía lo
saludaron y le franquearon la entrada.
-
Kasny din dejavrys --
saludó él
-
Kasny din Derek --
respondieron ellos e Istvan le hizo señas para que se sentara
Derek repasaba a toda velocidad sus últimas actividades y aunque después
que superó los seis meses en el Laki era usual que alguno de ellos llamase su
atención por haber hecho alguna trastada a alguien, no encontraba nada en su
archivo mental que justificase un regaño.
-
¿Sucede algo? --
preguntó
-
No, pero después de reunirnos anoche,
llegamos a la conclusión de que ya te hemos enseñado todo cuanto podíamos enseñarte
-- dijo Istvan
Derek abrió los ojos con desmesura porque aunque ciertamente ya llevaba
allí más de año y medio, había escuchado a los Havariks decir que el
entrenamiento básico duraba cinco años, pero en ningún caso eso significaba que
estuviesen preparados para nada, ya que luego venían los estudios intermedios
que Derek no tenía ni idea de lo que eso podía abarcar, pero sí sabía que
duraba cinco años más, después de los cuales era que recién comenzaban a
trabajar. No obstante, seguían un programa de entrenamiento constante si
querían convertirse en Lovets que era el grado al que todos aspiraban y el que
les permitía un trabajo relativamente más cómodo. De manera que aunque él no
era aspirante a Havarik, se sorprendió mucho que le dijesen aquello.
-
¿Quieres decir que ya puedo
marcharme?
-
Te recuerdo que nunca estuviste preso
aquí y has salido muchas veces -- le dijo Istvan --
Pero sí, como acabo de decir ya estás todo lo preparado para manejar tu
habilidad como podíamos esperar -- pero como el chico no dijo nada y eso era
casi un milagro, Istvan agregó -- Todos los Leyvychtel están de acuerdo en que
has superado las expectativas, y lo único que me voy a permitir recomendarte
como siempre, es que recuerdes que lo más importante en toda circunstancia es
que conserves la sangre fría. A pesar de que estás perfectamente preparado para
hacerlo, eso siempre será tu punto débil.
-
¿Entonces… así nada más?
-
Si esperabas un diploma o algo
así… --
comenzó Iván
-
¡Isilier Iván! --
ordenó Darko con ganas de sacudirlo
Tanto Darko como todos los demás entendían perfectamente lo que le sucedía
a Derek, no solo estaba sorprendido, sino que se había habituado a la vida en
el Laki, había hecho amigos y le gustaba estar allí. De modo que la sorpresa lo
hizo sentirse repentinamente en el aire. Lo que molestaba a Darko era que Iván
sin duda estaba perfectamente consciente de ello, pero por algún motivo su hijo
no podía vivir sin estar haciéndole la vida miserable a alguien.
-
Derek, esto solo significa que ya
estás preparado para desenvolverte frente a cualquier Devrig sin que este note
que conoces su condición, del mismo modo que lo estás para proteger tu mente de
cualquier ataque efectuado por uno que sea lo bastante hábil como para
intentarlo, aparte de que has adquirido otras destrezas que esperamos te sean
útiles en el mundo al que perteneces, pero en ningún caso significa que no puedas
venir siempre que lo desees, y cualquiera de nosotros acudirá si nos necesitas
-
Dicho de otro modo, no vas a librarte
de nosotros tan fácilmente -- dijo Iliar
Tal y como pensaban los presentes, si bien a Derek lo emocionaba volver a
casa, algo que aunque muchas veces había querido hacer no había hecho temiendo
que una vez allí no quisiese dejar de nuevo a su madre y a sus hermanos, no era
menos cierto que en aquel año y medio de
convivencia diaria se había sentido mucho mejor de lo que hubiese podido esperar
con sujetos cuyos hábitos, costumbres, cultura y lengua eran tan diferentes a
las suyas. No obstante, Derek era un espíritu práctico y una vez superada la
sorpresa se tomó las cosas de la forma más natural posible.
-
Bueno, tampoco ustedes van a deshacerse
tan fácilmente de mí -- dijo de manera más alegre
-
Lo cual es más un castigo que otro
asunto -- dijo Iván
-
Castigo que te mereces sin duda
alguna -- le dijo él y luego miró a los demás -- Les
estoy muy agradecido a todos y aunque es poco lo que yo podría hacer por
ustedes, no dudaré en hacer cualquier cosa que me pidan -- y
miró a los dos incordios del grupo -- Excepto por ustedes -- y
ellos rieron
-
Gracias Derek -- le
dijo Istvan -- Le informaré a James que se prepare, porque
si no tienes inconveniente, seguirá a tu servicio por…
-
¿A mi servicio? -- lo
interrumpió él -- No me gusta como suena eso, y si viene será
como mi amigo
-
De acuerdo --
dijo Istvan
Después de eso Derek abandonó el despacho y se fue a dar una última vuelta
por el Laki para despedirse de todos. Hubo diversas reacciones entre los
Havariks, desde los que le hicieron toda clase de bromas hasta los que se
mostraron verdaderamente tristes por su partida. Iba caminando por un pasillo
en compañía de un grupo especialmente ruidoso cuando fue detenido por uno al
que no recordaba y que seguramente era de los nuevos.
-
¿Puedo hablar un momento contigo
sarì?
A Derek lo sorprendió más el tratamiento que la petición, pero aún así se separó
de los demás y caminó al lado del Havarik.
-
Solo quería darte las gracias --
dijo el chico
-
¿A mí? ¿Por qué? --
preguntó Derek con la mayor extrañeza
-
Por intentar ayudarme -- le
dijo --
Yo soy el Havarik al que Yuri estaba entrenando el día que te peleaste
con él
Si antes Derek estaba sorprendido, ahora lo estaba mucho más. El hecho en
cuestión había ocurrido hacía alrededor de ocho meses atrás, y realmente él
nunca se sintió interesado por saber quién era el infortunado que recibía el
entrenamiento, pero sí recordaba poco más o menos que le había parecido un
sujeto que no estaba en condiciones físicas para recibir aquel trato. Sin
embargo, el que tenía en frente en ese momento, le sacaba casi una cabeza y sin
duda estaba en perfectas condiciones.
-
¡Vaya! --
exclamó Derek y luego agregó -- Pues me alegra ver que lo superaste y espero
que te esté yendo bien en el entrenamiento
-
Gracias, y sí, estoy por terminar y
pronto podré comenzar a trabajar
Esto sorprendió a Derek, porque tenía entendido que el asunto del clima era
una de las primeras fases del entrenamiento, de modo que no podía ser que
estuviese por terminar.
-
Lo que sucede --
dijo él cuando Derek expuso lo que estaba pensando -- es
que si bien pude con todo, esa parte fue la que más me costó. No a todos nos va
igual, unos son más hábiles para unas cosas que para otras, pero eso no detiene
el avance en las otras áreas.
-
Bueno me alegro por ti
-
Aunque lo que hiciste no era
necesario, sé que tuviste buenas intenciones y no voy a olvidarlo --
dijo él y extendió su mano -- Mi nombre es Ekain Kaczynsky, y si alguna vez
me necesitas, estaré muy complacido de servirte
-
Gracias Ekain, ahora debo marcharme
porque vuelvo a casa -- le dijo Derek
-
Lo sé, por eso quise hablarte antes
de que te marcharas
-
Buena suerte entonces -- le
dijo Derek estrechando su mano
Derek se alejó hacia donde lo estaban esperando, mientras que un poco más
allá estaba Istvan que había escuchado la conversación entre los muchachos y
sonrió.
-
Siempre te he dicho que hasta de las
peores situaciones termina por salir algo bueno
-- escuchó la voz de su padre
tras él -- Derek y Yuri pasaron un mal rato, pero inadvertidamente
Derek hizo de Ekain un amigo para toda la vida
-
Ak haryk
Un rato después estaban los Levjaner-Leychvytel y algunos Lerervyl en el
vestíbulo despidiendo a Derek. Después de haberse despedido de casi todos
incluido Yuri que llegó en último lugar, Derek se detuvo ante Iliar.
-
Gracias Iliar
-
Vanedharma --
dijo él y luego le dio un abrazo
-- Cuídate kicyk e intenta
conservar la cabeza en su lugar
-
Lo intentaré -- le
dijo y se volvió hacia Iván
-
Bueno, finalmente salimos de ti --
dijo él
-
Alguien escuchó tus plegarias sin
duda --
replicó Derek pero un segundo después se estaban abrazando
-
Nunca pensé que diría esto pero… te
voy a echar de menos pequeño demonio
-
Prometo no darte oportunidad de
extrañarme -- dijo él con sonrisa maligna
-
Te juro que si te metes en algún
horroroso lío no tendrás tiempo de lamentarlo, porque te voy a dar la paliza de
tu vida antes de que lo notes, infeliz
-- y le dio un golpe en la cabeza
-
Dhavjà Iván
-
No me lo agradezcas, solo cuídate kicyk
nycabek
Por último Derek se plantó frente a Istvan y extendió su mano.
-
De veras muchas gracias por todo
Istvan
-
Solo espero que hagas buen uso de lo
que has aprendido -- le dijo mientras estrechaba su mano -- Y
recuerda que puedes venir cuando quieras
-
Lo haré, no lo dudes
Derek se volvió y bajo apresuradamente las escaleras de la entrada al pie
de las cuales lo estaba esperando James y un grupo de Lovets que él no vio.
-
¿Listo para volver a casa? --
preguntó James
-
Eso creo --
giró la cabeza y les hizo un último gesto de despedida a los que estaban
arriba y volvió a mirar a James -- Hora de volver
James lo sujetó por un brazo y un segundo después ya se habían ido.
-
Buena suerte Derek Arlingthon --
murmuró Istvan
-
Si me lo preguntas, le va muy mal ese
apellido y en mi opinión ese chico debería llamarse Derek Saint-Claire --
dijo Iván
-
Pero nadie te lo está preguntando y
deberíamos dar gracias a los dioses que no es así, porque si tú has olvidado a
Armand Saint-Claire, yo no -- dijo Iliar
-
¡Iliar Drachavo, eres un…!
Pero Istvan decidió que ya había tenido suficiente de aquellos dos y se
alejó dejándolos en medio de otro de sus interminables pleitos. Sin embargo,
pensó que Iván se aproximaba bastante a la verdad, porque Derek sin duda era
más Saint-Claire que Arlingthon.
Entre tanto y mientras iban de camino, James iba pensando que aunque le
tenía verdadero aprecio a Derek, en aquel momento se habría cambiado por
cualquier otro Lovet, porque la tarea que tenía por delante se le antojaba
sumamente comprometida, especialmente después que cada uno de los
Levjaner-Leychvytel conversó con él con respecto al chico y sus palabras iban
desde las recomendaciones como que sin importar la hora del día o la noche les
avisara si había problemas, hasta las amenazas como fueron los casos de Sesviatsky
y Drachavo que le habían dicho en forma clara y directa que suprimirían su
cabeza si al kicyk Lord Arlingthon le sucedía algo.
Istvan se había encargado de avisar a Phillipe del regreso de Derek y él
estaba ansioso por ver a su nieto. Sin embargo, comenzó a pensar que algo iba
mal al ver que se tardaba tanto, pero otro Lovet se presentó en Cleves y les
dijo que Derek se detendría en Francia primero porque quería comprarles algo a
sus hermanos, de modo que Phillipe se armó de paciencia y se alegró de no haber
enviado mensaje a Darnley anunciando el regreso de Derek.
Durante el tiempo que había pasado Derek en Levzheir, había salido en
algunas ocasiones con sus amigos, y cada vez que tenía oportunidad adquiría
algún presente para los niños o para su madre que los Lovets se encargaban
diligentemente de hacerles llegar junto con sus cartas que no había dejado de
escribir religiosamente cada semana. Por supuesto Adrian lo había mantenido al
corriente de lo que se suponía había estado haciendo y cuando fue sustituido
por Damien una vez que Phillipe hubo retornado a Inglaterra éste siguió
informándolo, y así él podía contestar a lo que su madre o eventualmente su
padre le preguntaba.
Iziaslav había cumplido su palabra y pocos días después de su encuentro,
había hecho llegar a Derek otra figura tallada para Lucía, de modo que él se lo
había remitido de inmediato a su hermana junto con algunas otras cosas que les
había comprado.
De modo que esa parada podría haberse considerado innecesaria, pero se
negaba a llegar con las manos vacías. Cuando hubo comprado todo lo que le pareció,
se pusieron de nuevo en marcha y llegaron a Cleves al atardecer.
-
¡Derek! --
exclamó Phillipe al verlo
-
¡Abuelo! --
dijo él a su vez abrazándolo
-
¡Mon Dieu!
-- exclamó Phillipe de nuevo
mirándolo bien -- ¿Qué has estado haciendo? --
preguntó y Derek rió
-
Algo de ejercicio supongo --
dijo él
Después de eso Phillipe saludó a James y se dedicó a atacar a preguntas a
Derek, pero ahora que estaba allí, Derek tenía verdadera urgencia por ir a su
casa. De modo que después de cambiarse, algo que hizo más en beneficio de su
necio padre que porque pensara que lo necesitaba, partieron para Darnley.
En cuanto atravesaron los límites de la propiedad el corazón de Derek se
aceleró y cundo llegaron a las puertas del castillo, ya este latía en forma
descontrolada. Prácticamente se tiró del carruaje y subió las escalinatas a
todo correr.
-
¡Mamá! --
gritó mientras se dirigía hacia el salón
Sophie que estaba sentada haciendo bordado mientras conversaba con
Madeleine, al escuchar la voz de su hijo se puso de pie con rapidez dejando
caer su labor, pero cuando lo vio aparecer en la puerta del salón, corrió y
antes de llegar a sus brazos ya tenía el rostro bañado en lágrimas. Derek la
estrechó con fuerza contra su pecho y así la mantuvo durante varios segundos,
hasta que finalmente se separó un poco y tomó el rostro de Sophie en sus manos
secando sus lágrimas.
-
No llores madre, ya estoy de
vuelta -- dijo, pero sin ser consciente de que sus ojos
estaban en las mismas condiciones
-
Te eché tanto de menos cielo --
dijo ella
-
Yo también te extrañé mamá
Después de abrazarla de nuevo y parecía no querer dejar de hacerlo, miró a
su tía y se dirigió hacia ella mientras Sophie saluda a su padre y a James, pero
estaban en pleno saludo aun cuando entró Kendall.
-
¿A qué se debe tanto alboroto? -- preguntó
y Derek se volvió
-
Buenas tardes padre
-
¡¿Derek?! --
exclamó Kendall con incredulidad mientras caminaba hacia él
Por un momento a Kendall le pareció estar viéndose en un espejo pero veinte
años atrás, y en realidad pasada la sorpresa del primer momento, tanto Sophie
como Madeleine estaban pensando lo mismo. Si bien era cierto que siempre habían
sabido que de los hijos de Kendall el que más se le parecía era Derek, Sophie
pensó que el que se había marchado era poco más que un adolescente y el que
había vuelto era un hombre y el mencionado parecido se había acentuado en forma
notable. Pero mientras Sophie, Kendall y Phillipe estaban muy contentos,
Madeleine sintió que una mano helada apretada su corazón al recordar que su
sobrino estaba cercano a cumplir los veintiún años. No obstante, todo esto se
vio interrumpido por otro grito.
-
¡Derek! --
exclamaron dos voces casi idénticas
El aludido sintió que el piso desparecía bajo sus pies cuando vio a los
gemelos, porque aparte de lo mucho que habían crecido, el parecido con cierto
individuo era mucho más notorio. Sin embargo, hizo eso a un lado y se inclinó
para recibir en brazos a las dos personitas que corrían hacia él.
Esa madrugada una vez que el consejo
había decidido que Derek estaba listo para regresar a casa, Milorad se había ido
derecho a hablar con su hija, pero Istziar tomó la decisión de quedarse con la
promesa de que si el asunto se volvía inmanejable, regresaría de inmediato a
Yaroslavl. De modo que ese día lo había pasado en tensión y en cuanto lo sintió
llegar, ni siquiera tuvo tiempo para emocionarse o para ninguna otra cosa,
porque los aykeris habían dejado lo que hacían y habían corrido hacia la
puerta. Boris intentó detenerlos pero tanto él como Istziar se llevaron dos
nuevas sorpresas.
-
Apártate -- le
ordenó Alexander a Boris
-
Niños por favor --
había dicho Istziar -- esperen un momento, seguramente…
Sin embargo, no alcanzó a terminar cuando los niños se habían girado pero
fue Lucía la que habló.
-
Mi hermano está abajo y quiero verlo
ya
Lo sorprendente no fue lo que dijo ni el tono, algo a lo que ya se habían
acostumbrado, sino que los ojos de la niña y los de su hermano eran fulgurantes
rubíes. Dicho esto se giraron de nuevo y Boris tuvo la misma visión que
Istziar, pero Alexander no perdió el tiempo diciéndole de nuevo que se
apartara, sino que lo hizo a un lado él mismo, tomó la mano de Lucía y
abandonaron la habitación dejando a Boris tirado a varios metros. Desde luego
ni lo primero ni lo segundo era de ninguna manera normal, porque se suponía que
las características de su condición no debían aparecer aún, pero como en estos
aykeris nada parecía ser como debía, Istziar le preguntó a Boris si estaba
bien, él asintió y ella salió corriendo tras los niños. Y ahora estaba en la
puerta del salón viendo a Derek y pensó que quizá era buena idea volver a casa
lo antes posible.
Hola me gusta mucho esta historia.... Y mr preguntaba cuando ibas a publicar nuevos capítulos????
ResponderEliminarHola Natalia...
ResponderEliminarme alegra que te guste y si había demorado en actualizar, es porque como no tengo evidencia e que nadie lea (comentarios) nunca me acuerdo de hacerlo ocupada como estoy con otras historias...
gracias de nuevo... saludos IX
ResponderEliminarA mi me encanta aunque me trabo con los nombres raros
"Felicidades por tu historia"