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viernes, 12 de diciembre de 2014

Cap. 21 Sorpresas de Cumpleaños…



El día del vigésimo cumpleaños de Derek, despertó sobresaltado al sentir un chorro de agua helada en su rostro.

-         ¡Maldición!  --  exclamó el chico incorporándose en la cama

Aunque en un primer momento se imaginó que había sido Iván o Istval que también acostumbraba a aparecer de vez en cuando para fastidiarle la existencia, cuando abrió los ojos y aunque era consciente de que había más de una persona allí, el primer rostro que vio casi lo convenció de que estaba en lo cierto, pero al fijarse mejor notó que se trataba de  uno que ciertamente no esperaba ver.

-         ¡Yvaylo!  --  exclamó

-         ¡Kasny halvejares priyatel! [1]  --  dijo el Levajaner

-         Gracias, pero vaya forma de felicitarme  --  dijo saliendo de la cama y abrazando a Yvaylo, pero al hacerlo se fijó en los demás  --  ¡Luciano, Itlar!  --  exclamó de nuevo sinceramente feliz de verlos

-         ¡Kasny halvejares Derek!  --  dijo Itlar

-         Tanti auguri bambino  --  dijo a su vez Luciano

Pero después de saludarlos y agradecerles miró a todos lados

-         ¿Dónde está Dylan?

-         ¿Para qué quieres ver a ese infeliz?  --  preguntó Lucien con su habitual tono burlón

-         Está hablando con Istvan  --  dijo Itlar

-         ¿Entonces sí vino?

-         De hecho creo que va a irnos mal cuando sepa que lo dejamos atrás  --  dijo Yvaylo

-         Y ustedes  serán los que paguen por ello  --  dijo Itlar

Pero Yvaylo y Lucien estaban riendo con malignidad, lo que hizo recordar a Derek al padre del primero. Sin embargo, los ignoró y metiéndose al baño se dio una rápida ducha, se vistió a toda prisa y abandonaron la reducida habitación. Cuando casi habían llegado a las puertas del despacho de Istvan, Derek se detuvo en forma automática.

-         ¿Qué sucede?  --  preguntó Lucien

-         Nada, pero no podemos entrar si Istvan no lo autoriza  --  dijo, pero Lucien se limitó a sonreír y sujetándolo por un brazo lo arrastró con él

Inmediatamente los Lovets que estaban en la puerta se inclinaron.

-         Dhakvrevit larsèvirier  --  y acto seguido abrieron las puertas

Derek se dijo a sí mismo que era un soberano idiota al olvidar quién era aquel individuo, y en cualquier caso aplicaba casi lo mismo para los otros dos, porque sabía que estaban muy alto en la jerarquía del Arkel. Sin embargo, se olvidó de eso porque cuando entraron se hizo un silencio y fue casi palpable la tensión. Derek no había visto a Dylan desde que se enterase que era el padre de sus hermanos, razón por la cual todos los presentes fijaron su vista en el chico y en el caso de Iliar y de Yvaylo, estaban listos para actuar con celeridad si se producía cualquier explosión, mientras que Iván se veía sumamente tranquilo.

Dylan por su parte estaba más nervioso que preocupado y por un motivo muy diferente, ya que a lo largo de todo aquel último año y después que se había tranquilizado un poco, se había estado preguntando qué pensaría Derek ahora que sabía que él no era lo que había creído.

Pero ni la tensión de los unos, ni el nerviosismo del otro estaban justificados y fue algo que  quedó demostrado un minuto después cuando Derek camino a toda prisa hacia Dylan y lo abrazó.

-         Hombre sí que eres muy mal amigo  --  dijo  --  entiendo que antes quisieras evitarme, pero ahora que sabes que estoy al tanto de todo, no se justifica para nada

Casi pudo escucharse como todos soltaban el aire, pero sin duda el más aliviado era Dylan.

-         Me alegra mucho verte Derek, y lo que acabas de decir es algo por lo que tendrás que perdonarme, porque no podíamos verte hasta que te hubieses adaptado bien a las actividades aquí  --  le dijo y luego agregó  --  Feliz cumpleaños Derek

-         Digas lo que digas, necesitarás algo más que una felicitación para redimirte

Después de eso el ambiente se relajó, los demás pudieron felicitar a Derek y por último se acercó Iyul.

-         Me alegra verlo de nuevo Lord Arlingthon

-         Pues no te alegrará si vuelves a llamarme así, mi nombre es Derek

-         Creo que ya te había advertido que era un individuo desagradable  --  dijo una voz harto conocida y Derek se volvió

-         Pero sin duda tú me llevas ventaja nekasny  --  dijo el chico e ignorando a Istval que era quien había expresado su opinión, se giró de nuevo hacia Iyul  --  Ya sé que eres un príncipe y todo eso, pero no se me da bien eso del protocolo  --  Iyul rió mientras lo escuchaba

-         Descuida, conozco varios así y siguen vivos

Después de eso fueron a desayunar y aunque Derek normalmente lo hacía en el comedor general, en esta oportunidad lo hizo en el que había comido la primera vez que había estado allí. La conversación estaba muy animada, pero cuando Derek escuchó la campana que anunciaba la hora, miró a Darko que era con quien tenía actividad esa mañana.

-         En atención a la fecha, hoy tienes el día libre  --  le dijo Istvan

-         ¡Wow! ¡Dhavjà Istvan!

-         Espero que lo disfrutes  --  le dijo él y miró a los sizvitels  --  y ustedes por favor procuren no destruir lo que hemos hecho

-         Cualquiera diría que somos una mala influencia  --  dijo Lucien en tono ofendido

-         Definitivamente lo eres  --  dijo Iyul

-         ¡Ja! Claro, como tú eres tan bueno  --  decía Lucien mientras abandonaban el comedor

-         Gelayka Iván  --  dijeron Kireg y Anatoly una vez que ellos había salido

-         ¿Ilè sker?  --  peguntó él

-         Porque has hecho un gran trabajo con él

-         Si lo están diciendo porque no quiso quitarle la cabeza al Rybik apenas lo vio, eso definitivamente no es mérito mío. El hecho de que sea explosivo no significa que no sea inteligente, de modo que su comportamiento hacia el Rybik solo obedece a que escuchó con atención lo que se le dijo, y lo más importante, que de veras le tiene aprecio  --  aclaró Iván

Mientras el grupo caminaba por los pasillos del Laki, Dylan miraba con atención a Derek. Ciertamente ya no era el niño que había conocido y aunque le parecía estar viendo a Kendall cuando tenía su edad, su condición le permitía ver que más allá de sus rubios cabellos, sus ojos azules y sus facciones netamente Arlingthon, subyacía la esencia Saint-Claire. De modo que si debía ponerlo en palabras, Derek era por fuera un Arlingthon y por dentro un Saint-Claire.

Aunque ya Dylan había estado en muchas otras ocasiones en el Laki, porque cada vez que quería hablar con Istvan iba hasta allí, se sorprendió de la soltura y comodidad con la que se manejaba Derek en un lugar donde cabría esperar que fuese la pieza discordante, y se sorprendió aun más al ver que todos lo trataban como uno más de sus compañeros. Y por supuesto Yvaylo, Itlar, Istval e Iyul no desaprovecharon la oportunidad para hacerle la vida miserable burlándose de él porque era obvio que Derek hablaba y entendía el Devriùrik – que era el idioma oficial de los Devrigs – muchísimo mejor que él, y si se salvó de la inmisericorde lengua de Luciano fue porque él mismo hacía el menor uso posible de ese idioma.

Llevaban un brevísimo lapso de tiempo recorriendo las instalaciones entre bromas y anécdotas, cuando Lucien como cabía esperar de un ser tan inquieto, se aburrió y propuso salir un rato.

-         No sé si puedo marcharme  --  dijo Derek

-         No estás preso  --  dijo Yvaylo

-         Y aunque lo estuvieras, no supondrás que alguien iba a impedirnos a alguno de nosotros sacarte de aquí ¿no?  --  dijo Lucien con su habitual arrogancia

-         Supongo que no, pero no quiero disgustar a Istvan, ya lo hice en una ocasión y les aseguro que es una experiencia que no quiero repetir, porque las consecuencias no fueron nada gratas

Las expresiones de todos reflejaban distintos niveles de asombro, primero porque disgustar a Istvan era algo que parecía tan improbable como un viaje a la luna, a menos que se tratase de un criminal, y que encima hubiese tenido consecuencias era más increíble aún. Pero como siempre el más volátil del grupo que tenía muy mala cara porque en su opinión Istvan no tenía por qué hacer pasar malos ratos a Derek, fue el que habló

-         ¿De qué estás hablando?  --  preguntó Lucien deteniéndose

Y Derek procedió a contarles lo que había sucedido con Yuri. Los Levjaners entendieron la gravedad del asunto, pero dudaban mucho que Istvan hubiese estado disgustado y con toda probabilidad lo que había estado era muy preocupado. Dylan recordó por lo que había tenido que pasar él cuando Iyul lo entrenó para soportar las temperaturas y supuso que si para él había sido una experiencia atroz y que no iba a olvidar nunca, desde la perspectiva de una persona normal debía ser un espectáculo difícil de asimilar y conociendo a Derek como lo conocía, no le extrañaba que hubiese reaccionado de aquel modo. Y en el caso de Iyul y Lucien si bien entendían que aquello era de vital importancia para todo Devrig, en ningún caso estaban de acuerdo en que Istvan hubiese reprendido a Derek porque él no era uno. Evidentemente desde su posición ellos no podían entender que una de las obligaciones de Istvan era hacer respetar las normas a todos los que viviesen allí, e independientemente del hecho que Derek fuese un caso especial, debía someterse a ellas.

-         …de modo que aunque Istvan en ningún momento fue desagradable conmigo  --  estaba diciendo el chico  --  y de hecho pienso que por mi comportamiento yo merecía un castigo que no me impuso, eso me hizo sentir mucho más miserable

Al escuchar eso, al menos Iyul y Lucien se sintieron más tranquilos. De modo que le aseguraron que no estaba cometiendo ninguna falta y que para probárselo irían a decírselo a Istvan y así él mismo vería que no había problemas.

-         Bueno ve a cambiarte  --  le dijo Lucien

-         ¿Cambiarme?

-         No pensarás salir vestido así ¿no?  --  dijo él horrorizado e Yvaylo rió

-         Pues no le veo nada de mal, estoy muy cómodo con esta ropa

-         ¡Da Dio!  --  exclamó Lucien poniendo los ojos en blanco  --  Veamos Derek  --  dijo pasando un brazo por encima de los hombros del chico  --  Esas ropas son un insulto al buen vestir, y ninguna criatura del universo se fijaría en un sujeto que va vestido como un bucanero

Todo ese alboroto obedecía a que Derek iba vestido como cualquier miembro del Arkel, es decir, pantalón negro, camisa blanca y botas altas. Lo único que lo diferenciaba de los Lovets era la ausencia del chaleco de cuero negro y en el caso de los Levjaners, sumaban a todo esto un trozo de tela atado al cuello, un accesorio que estaba a medio camino entre una lavallière y una bufanda y era de seda negra, algo que por supuesto él no tenía.

Pero mientras Lucien perdía miserablemente su tiempo dándole clases a Derek de lo que él llamaba buen vestir, los demás se partían de risa, unos porque conocían bien el desprecio de Derek por aquello, y otros porque sabían la manía de Lucien por la ropa.

Finalmente Lucien tuvo que renunciar a su cruzada, Derek se quedó como estaba y partieron. Aunque sin duda llevaban la mejor guardia del mundo, Istvan insistió en que un destacamento de Lovets los acompañase entre los que por supuesto iba James que seguía siendo la compañía oficial de Derek.

Como Derek había abandonado Levzheir en muchas ocasiones desde su ingreso para ir de paseo con sus compañeros cuando estaban libres, ya se había acostumbrado a la sensación, de modo que en esta ocasión no se sintió descompuesto, algo que como no sabía lo anterior, sorprendió mucho a Dylan que recordaba con exactitud que aunque ya era un Devrig cuando él se movilizó de aquella manera y podía ver bien por dónde iba, igual había experimentado una sensación my desagradable en las primeras ocasiones.

Derek se sorprendió cuando llegaron y vio a su alrededor, porque se trataba de un lugar tremendamente concurrido, lo que era normal ya que se encontraban en un bazar de Bagdad. Caminaron un rato por entre las hileras de puestos donde los comerciantes exponían sus mercaderías admirándolas o riendo ante algunas extravagancias. Lucien como de costumbre adquirió cuanto cachivache se le antojó, bien fuese porque le encontraba alguna  improbable belleza que solo él veía, o porque en realidad la tuviese. Derek se interesó particularmente por un juego de dagas con mangos hermosamente tallados e incrustaciones de piedras preciosas, de modo que Dylan insistió en comprárselo como regalo de cumpleaños. Como Iyul vio que le interesaban las armas, le regaló una espada árabe cuya empuñadura y hoja tenían aproximadamente la misma longitud. Mientras que Lucien que solía pensar que todos tenían sus excéntricos gustos, le regaló un anillo que según el tendero había pertenecido a quien sabe que imaginario gobernante y tenía propiedades mágicas, pero si Lucien lo compró no fue porque creyese en la historia tras el anillo, sino porque le parecía que era una obra de arte de orfebrería, aunque los demás pensaban que era una monstruosidad pero Derek se lo agradeció lo mismo.  

Después de eso se trasladaron a Estambul que ya para entonces era una hermosa metrópoli, porque Lucien se antojó de tomar café turco, pero como ya era hora de la comida y al menos Derek tenía hambre, decidieron ir a un lugar donde pudiesen comer. Por supuesto si hubiesen podido escoger, en el último lugar donde lo habrían hecho era allí, porque según lo que Dylan podía recordar, cocinaban con muchas especias. De modo que fueron cuidadosos a la hora de ordenar. Casi todos pidieron Lüfer, que según  le explicó Dylan a Derek se trataba de pescado azul del Bósforo, pero como el chico no era muy afecto al pescado se decidió por el Kebab, que es una especie de guiso de carne que se hace en un recipiente de cerámica que se rompe para servir. Itlar, Yvaylo y Misha también pidieron una bebida llamada Raki, y apenas lo trajeron Dylan lo miró con desconfianza al ver la transparencia. Según ellos era anís turco, pero en cualquier caso Dylan no se animó y pidió un tradicional e inofensivo vino blanco. Todos a excepción de Derek declinaron el postre que consistió en Baklava, que es un pastel elaborado con frutos secos triturados envueltos en una pasta y bañado de miel, mientras que los demás pidieron el Kahve, que era por lo que originalmente habían ido hasta allá.

-         El mío Sade  --  pidió Lucien

-         Orta  --  pidieron los demás

-         ¿Cuál es la diferencia?  --  preguntó Derek

-         Una de las particularidades del café turco es que  no se filtra y el azúcar se le coloca al momento de prepararlo y no después  --  explicó Iyul  --  Orta es el estándar, Sekerli es más dulce y Sade es sin azúcar, y lógicamente solo alguien tan amargo como este infeliz  --  dijo señalando a su hermano  --  puede tomarlo así

Como Derek no había querido el café, cuando lo llevaron Lucien insistió en que al menos lo probase, pero una vez que lo hizo lo escupió en todas direcciones mientras Lucien reía en forma maligna.

-         ¡Maldito infeliz!  --  dijo el chico mirándolo con ganas de golpearlo  --  eso es asqueroso

Una vez que terminaron allí, lo llevaron a Yaroslavl pero Lucien se excusó y dijo que volvía más tarde.

-         ¿Dónde vas?  --  preguntó Derek cuya curiosidad era una de sus características más destacadas

-         El hecho de que sea tu cumpleaños no me obliga a pasar todo el día contigo, y ciertamente hay algunos asuntos para los que prefiero otra clase de compañía  --  dijo sonriendo en forma perversa

-         ¡Ah, njà dobrìly ledzidy! [2]  --  exclamó Derek que tampoco se caracterizaba por su discreción

-         Me alegra que seas bueno para los idiomas, pero me alegrará más que evites usar ese conmigo  --  y ahora fue Derek el que sonrió con malignidad

-         Pues así como nada te obliga a pasar el día conmigo, ciertamente a mí nada me obliga a complacerte, de modo que hablaré como me plazca

Los Levjaners sintieron un maligo placer al ver que si bien Dylan solía expresar sus opiniones de forma muy poco ceremoniosa, en el caso de Derek parecía ser de la misma exasperante clase que Lucien, lo que los llevó a pensar que el universo era justo y le estaba dando a su malcriado sizvitel lo que merecía.

Sin embargo, el asunto no pasó de allí y Lucien se marchó mientras Iyul y Dylan se ocupaban de mostrarle el Dvorets a Derek. Pronto se dieron cuenta que si bien el chico y Lucien no compartían la misma opinión en cuanto a las ropas, sí lo hacían en relación al lujo y a las obras de arte, algo que en realidad no extraño mucho a Dylan, porque Derek era hijo de Kendall y al igual que él mismo, lógicamente había crecido rodeado de toda clase de lujos y comodidades. Y por otra parte era hijo de Sophie, cuyo amor por el arte Dylan conocía bien.

-         ¿A quién pertenece este Dvorets?  --  preguntó Derek

-         Es la vivienda oficial de la familia real  --  le informó Iyul

-         Es decir que ustedes viven aquí

-         No exactamente, cada uno de nosotros tiene uno propio  --  le dijo  --  El mío es un poco más pequeño pero muy parecido a este. El de Lucien está decorado con una mezcla imposible de varias corrientes artísticas y toda clase de objetos perfectamente inútiles. Y el de Dylan como debes imaginar, es un castillo netamente occidental

-         ¡Vaya!  --  exclamó él  --  ¿Y entonces quién vive aquí?
-         En realidad nadie, lo utilizamos más que todo para las reuniones oficiales, este es para nosotros lo que el Palacio de Whitehall es para ustedes, con la diferencia de que su soberano vive en él y el nuestro no  -- aclaró Iyul

Dylan miró la hora y Derek sonrió.

-         ¿No es temprano para le té?  --  preguntó suponiendo que a pesar de su transformación, posiblemente Dylan seguía manteniendo sus costumbres al igual que James

-         Lo es, pero tenemos otras cosas qué hacer  --  le dijo mientras caminaban hacia el salón

-         ¿Ustedes también?  --  preguntó con una nota de fastidio en la voz

-         Descuida, éstas te incluyen  --  le dijo Dylan

-         Ah pues si es así, gracias  --  pero en cuanto llegaron al salón, los ojos de Derek brillaron con malignidad al ver a Luciano  --  Vaya, vaya  --  dijo en tono perverso  --  Dime Luciano ¿no era suficientemente linda la chica en cuestión? Porque la otra alternativa es que tu actuación haya sido tan deplorable que…

Pero se detuvo súbitamente cuando estuvo más cerca y se dio cuenta que aquel sujeto fuese quien fuere, no era Luciano.

-         Derek  --  dijo Iyul  --  él es nuestro padre, Iziaslav Yaroslávich

Por primera vez en su vida Derek realmente entendió lo que significaba la frase: deseo que me trague la tierra, porque por mucho que le desagradase el protocolo, acababa de dirigirse a un soberano reinante de la forma más poco ceremoniosa del mundo




[1] Kasny halvejares priyatel: Feliz cumpleaños amigo
[2] ¡Ah, njà dobrìly ledzidy! : ¡Ah, una bonita mujer!

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